Mudarse con niños no tiene por qué ser tortuoso

Escrito por: Mariel Hernández Maldonado

Mudarse nunca es fácil, empacar y desempacar, organizar las cajas de acuerdo a las habitaciones, no perder de vista las cosas importantes y buscar el camión que nos ayude a mover nuestras pertenencias puede ser un largo camino. La primera mudanza puede no ser tan dura porque definitivamente no tenemos muchas cosas que mudar de casa de nuestros padres a nuestro nuevo nido, pero ya que hemos detectado las cosas que se requieren en el hogar, nos damos cuenta de que cada vez necesitaremos más cajas; aún más si tenemos hijos.

Cuando ya hemos formado una familia también es importante tomar en cuenta que los hijos deben poder adaptarse bien al cambio de ambientes y espacios; la psicología afirma que en ocasiones, los niños que no pueden adaptarse al nuevo ambiente crean un amigo imaginario, sin embargo no es un problema, es sencillamente su manera de lidiar con la situación. Otras maneras en las que podemos notar que la mudanza afecta a nuestros hijos es el cambio en sus ciclos de sueño; a veces no pueden dormir o presentan terrores nocturnos y hay que saber lidiar con ellos.

A continuación daremos algunos sencillos tips que nos ayudarán a hacerles el cambio más amigable, algo que será importante tanto para ellos como para nosotros.

• El más importante de todos los consejos es mantener la calma, pensar que no solamente el estrés afecta en nuestra vida y rutina como padres, sino que para ellos también es un gran cambio y regañarlos o mostrarnos enojados con ellos o entre los padres puede agravar el asunto.
• Mantener una actitud positiva nosotros como padres es algo que les ayudará a ellos también a mantenerse positivos, recordemos que nuestros hijos son nuestro reflejo.
• Hacer el empaque de las pertenencias algo en lo que ellos puedan participar les dará una perspectiva divertida y sobre todo más personal de la mudanza; hacerlo todo nosotros y dejarlos fuera de la dinámica puede crear conflicto pues sentirán menos propio el nuevo espacio en el que no se les permite participar.
• Dependiendo de la edad que tengan nuestros hijos podemos hacer más sencillo el proceso si les contamos historias positivas sobre el nuevo lugar en donde van a vivir; esto incrementará las ganas de conocer y ser parte del nuevo entorno.
• Nosotros, como padres debemos dedicarnos a conocer los parques, cines y en general lugares de diversión cercanos al nuevo lugar para que esto sea un aliciente para el niño.

Nunca debemos olvidar que tal y como nosotros, nuestros hijos son seres que sienten todos los cambios, perciben los cambios de ánimo y la tensión en el ambiente.

Author: director